• La universalidad en la equidad como mecanismo para priorizar a los sectores más vulnerables, garantizando el derecho a la educación, reduciendo la inseguridad alimentaria y nutricional.
  • Una gestión eficiente de los recursos. En Asunción y su zona metropolitana la gestión será dirigida por el Ministerio de Desarrollo Social (MDS); y, a nivel departamental por las Gobernaciones, involucrando a las municipalidades, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y organizaciones civiles en la micro-planificación y el control.
  • La creación del Consejo Nacional de Alimentación Escolar (CONAE), como regulador para la provisión y los controles administrativos y operativos, rendición de cuentas y fiscalización. La Contraloría General de la República (CGR) realizará controles concurrentes; y, la ciudadanía podrá denunciar el incumplimiento en la provisión y la calidad del almuerzo.
  • La creación del Fondo Nacional de Alimentación Escolar (FONAE) permitirá transparentar y blindar todos los recursos que financiarán el programa, permitiendo una mejor trazabilidad del origen y destino de los recursos.

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